Diabetes y la comunicación con el odontólogo

Texto: Juan José Aguilar

Muchos pacientes coinciden en que cuando de ir al dentista se trata, no saben si mencionar su condición médica de diabetes, por experiencias anteriores en las que les han negado el tratamiento. A veces prefieren hacer pasar la diabetes desapercibida, para recibir la atención como una persona promedio. Esto no es recomendable, ya que un paciente diabético tiene requerimientos especiales en su salud bucal.

No tengas miedo
Todos los odontólogos están capacitados para llevar el tratamiento que requieres, e incluso aunque no se lo menciones, el odontólogo puede notar cuando un paciente tiene signos de diabetes; es mejor hacérselo saber por tu cuenta.

Consejos para personas diabéticas

Cepilla tus dientes después de cada comida. Así evitarás alimentar las bacterias que están en tu boca. El uso de pastas y enjuagues con flúor ayudan a fortalecer el esmalte que en pacientes diabéticos se debilita por la falta de saliva que aporta minerales.

Usa hilo dental. Los espacios entre los dientes son los que necesitan más dedicación, porque ahí se resguardan las bacterias y es donde mayor daño se produce.

Evita los irritantes. El fumar, tomar bebidas alcohólicas o masticar tabaco, son factores desencadenantes de aftas bucales y problemas gingivales severos, siempre delicados en una persona diabética.

Consume agua periódicamente. Cargar una botella de agua contigo te ayudará a combatir los problemas bucales ocasionados por la resequedad típica de esta enfermedad, y a diluir los ácidos producidos por las bacterias.

Controla tus niveles de glucosa. Siempre debes estar bajo control de un médico endocrinólogo. Si mantienes tus niveles de glucosa en un rango sano, automáticamente disminuyes los efectos colaterales en la boca. Está científicamente demostrado que tener problemas bucales puede descontrolar tus niveles de glucosa en sangre. También ocurre a la inversa: es una relación de 2 vías.

Escucha a tu boca. Tu boca te grita diariamente por atención, si tus encías duelen o están rojas, sangran, tienes mal aliento, si las piezas se mueven o se ven más largas, con la encía desprendida, puede ser un signo grave de periodontitis y podrías perderlas rápidamente.

Visita a tu dentista. Para así poder diagnosticar y prevenir problemas irreversibles. Con la diabetes se disminuye la capacidad de combatir las bacterias, pero es mentira que todo diabético debe perder sus dientes. Con los cuidados necesarios podrás mantener tus dientes durante toda la vida.

Mi consejo: muchos pacientes toman dosis extras de su medicamento o se automedican fuera del tratamiento para visitar al odontólogo. Esto puede ser causa de hipoglucemias, es decir, baja drástica del azúcar en sangre, que ocasionan desmayos durante el tratamiento dental. Tu odontólogo será tu mejor aliado en la resolución de tus problemas bucales, acércate a él con toda confianza.

Foto: Thinkstock

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