Odontología infantil, ¿cuándo comenzar?

Texto: Irina Kenigsberg

Si tienes un hijo, seguro visitas al pediatra con frecuencia ¡y eso está muy bien! Pero, ¿qué pasa con la salud dental de tu pequeño? La odontología infantil es clave para realizar cuidados preventivos y comenzar a educar a tu niño sobre la higiene oral. ¡Checa cuándo deberías comenzar a llevarlo al dentista!

¿Cuándo empezar?

El profesional de la salud del bebé debería dar a los padres una evaluación del riesgo dental del niño a sus seis meses, según lineamientos de la Academia Americana de Odontología Pediátrica (AAPD, por sus siglas en inglés).

Luego, a los 12 meses los padres deberían elegir un odontólogo para sus hijos y realizar la primera visita. Si el primer diente aparece antes del año de edad, deberían comenzar en ese momento, se aclara en Mouth Healthy (sitio de la Asociación Dental Americana).

Esa visita debería incluir la creación de un historial médico del niño y de uno dental tanto de él como de los padres, se informa desde AAPD. También, un examen oral, una demostración de cómo cepillarse los dientes y, de ser necesario, un tratamiento de barniz de flúor.

Según Healthy Children (sitio de la Academia Americana de Pediatría), el barniz de flúor puede recomendarse cuando los niños tienen un diente o más, para ayudar a prevenir las caries. Puede aplicarse de dos a cuatro veces por año.

Además, en esa primera visita debería evaluarse el riesgo de que el niño desarrolle caries y determinar un plan de prevención, así como indicar a los padres cuándo debería volver a la consulta.

Consejos para la visita

¡Ir al dentista por primera vez es un gran hito! Checa algunos tips provistos por Mouth Healthy:

– No se recomienda pedir la cita a la hora de la siesta. En cambio, elige un horario en el que tu hijo suela estar descansado y pueda cooperar.

– Asegúrate de que tu hijo haya comido algo liviano y se lave los dientes antes de ir al dentista.

– Ten snacks a mano por si tiene hambre, pero procura dárselos luego de que lo revisen.

– Piensa en esa visita como una experiencia divertida y feliz. Si tu hijo se siente molesto o mal cuando están ahí, colabora con el odontólogo para ayudar a calmarlo.

Y tú, ¿qué recuerdas de la primera visita de tu hijo al dentista?

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